miércoles, 29 de septiembre de 2004

Sí digo que la luna permanece
en el altar del sufrimiento
en los caminos de la usura
y nadie puede detener
los silencios que se dirigen a ti
riesgos del instante
las fracturas del invierno
donde no hay distancia ni fracaso

camino con la frente en los bolsillos
y las manos en alto

llegar
espero
a las ciudades
del espacio.

No hay comentarios.: